"Tu voz... que por encima de la alharaca del mundo me habla para decirme en lenguaje cifrado que me amas"
Darío Jaramillo Agudelo
Verdad dulce de tu voz,
Lo que un día nos unió;
Tu voz de conjuros
Sin promesas
Nunca partió...
Me habita, me besa
Sin tiempo o frontera,
Parte mi silencio en dos;
Tuya si me piensas
Mio si te pienso:
Tu voz rocío
Y tu voz eco
En mí
Adentro,
Sólo vos.
Sólo vos.
Tu voz
Agua, vino y sangre,
Sacia, deshidrata;
Sed y hambre.
¡Reclamo de mi pecho!
Tu voz deber y derecho
Suspirando en todas partes:
Mi piel, ahora tu piel
Mis calles, ya tus calles;
Lluvia errante de mi invierno
Recorre el cuerpo como nadie,
Lluvia errante de mi invierno
Recorre el cuerpo como nadie,
Suficiente entre mis dedos
Si me hablas un instante.
Arte cerca, musa lejos,
Excusa de cuanto arde:
Tu voz indispensable aire de mi fuego.
Verbo impronunciable,
No hables de amor,
No me extrañes,
Si ya no estoy
Y se hace tarde,
Llévate todo menos tu voz:
¡No te calles!
¡No te calles!