La inscripción lapidaria, aquel epitafio promesa envejece en las grietas de mis piedras: “El poema eres tú” fue acaso mi última certeza. Se...
César
Perdí el poema que me diste antes de morir. ¿Por qué he vuelto a aguardar la muerte para atesorar la vida? Juraba, César, que los hombres como tú eran eternos.
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